Aminocaproico ácido
Acción terapéutica.
Antihemorrágico.
Propiedades.
El ácido aminocaproico controla las hemorragias por inhibición competitiva de las sustancias que activan el plasminógeno y, en menor grado, por inhibición no competitiva de la actividad de la plasmina (fibrinolisina). Se absorbe en forma rápida tras la administración oral y no parece unirse a las proteínas plasmáticas. El tiempo en que se obtiene la concentración máxima es en las 2 horas siguientes a la dosis oral única. La concentración plasmática terapéutica para la inhibición de la hiperfibrinólisis sistémica es de 130mg/ml. Se elimina por vía renal en forma rápida y la mayor parte sin metabolizar.
Indicaciones.
Hemorragias debidas a hiperfibrinólisis o a fibrinólisis urinaria.
Dosificación.
Cuando se utiliza después de la cirugía de próstata se ha demostrado que las dosis menores que 6g en las primeras 24h son eficaces para reducir la pérdida de sangre, ya que el ácido aminocaproico se concentra en la orina. Dosis para adultos con síndromes hemorrágicos agudos: 5g la primera hora, seguidos de 1g a 1,25g a la hora, durante 8 horas o hasta obtener la respuesta deseada. Dosis máxima: hasta 30g cada 24h. Dosis pediátricas: 100mg/kg o 3g/m2 la primera hora, seguidos de 33mg/kg o 1g/m2 a la hora, sin sobrepasar los 18g/m2 en 24h. Ampollas: por infusión IV, 4g a 5g administrados durante 1 hora, seguidos de una infusión continua a una velocidad de 1g/hora durante 8 (ocho) horas o hasta obtener la respuesta deseada. Hemorragia subaracnoidea: de 1g a 1,5g/hora, administrados con preferencia mediante infusión IV continua. Dosis máxima para adultos: hasta 30g cada 24 horas. Dosis pediátricas: infusión IV, inicialmente 100mg/kg o 3g/m2 durante 1 hora, seguida de infusión continua a un ritmo de 33mg/kg/24 h o 1g/m2/24h sin sobrepasar 18g/m2 cada 24 horas.
Reacciones adversas.
Los pacientes sometidos a esta medicación deben ser controlados para la detección de signos de complicaciones tromboembólicas. Requieren atención médica los pacientes que presenten dolor muscular o debilidad severa y continua (miopatía asociada con necrosis de las fibras musculares), bradicardia, cansancio o debilidad no habitual, edema, cefaleas, mareos, rash cutáneo o congestión nasal.
Precauciones y advertencias.
Debe usarse con precaución en el segundo y tercer trimestre del embarazo, ya que no se han realizado estudios controlados. El tratamiento con ácido aminocaproico debe interrumpirse cuando exista evidencia de que la hemorragia ha cesado o cuando los análisis de laboratorio de fibrinólisis indiquen que no se requiere más medicación. Tratar de insertar la aguja con cuidado, para minimizar el riesgo de tromboflebitis.
Contraindicaciones.
Coagulación intravascular activa. La relación riesgo-beneficio debe evaluarse en presencia de hematurias con origen en el tracto urinario superior, enfermedad hepática, enfermedad renal, predisposición a trombosis, cardiopatía.